Fuckowski, memorias de un ingeniero

Uop!

Título: Fuckowski, memorias de un ingeniero
Autor: Alfredo de Hoces
Editorial: Bubok Publishing S.L.
Páginas: 194

ISBN: 9788490096260

Precio: 3,50€ (ebook)




Opinión: Hace poco descubrí este libro, aunque después me enteré de que tenía sus añitos ya, pero bueno, podemos decir que es atemporal. El principio del libro me encantó, me reía un montón y me lo pasé en grande, después sin embargo la cosa decayó y no sé muy bien porqué, si porque ya no me sentía tan identificada con la historia, si Fukowski me parecía un poco pedante. No sé, el caso es que al final del libro volvió a gustarme y por eso me ha dejado un buen sabor de boca.


No voy a decir que el libro es únicamente para ingenieros (o proyecto de) porque normalmente leemos novelas de escritores, médicos, policias, etc... y sin embargo nos gustan. Así que aunque no sea ingeniero el libro gustará. Es verdad que tal vez te puedes sentir más identificado con la historia, pero eso creo yo, que sólo es en el principio del libro después ya se convierte en un personaje excéntrico cualquiera.


Lo que si me gustaría añadir en este mini reseña (muy mini ya que no tengo mucho tiempo) es algunas de las frases del libro, que tiene verdaderas perlas. cada vez que cogía en libro mínimo subrayaba un par de frases, pero bueno, he hecho una selección y os pongo las mejores en mi opinión:

El verano siguiente yo sufría el desgarro esfinteriano típico del primer año de carrera, y Pijoski había aprobado COU con sobresaliente. Ya estaba matriculado de Economía en la Universidad de Fausto. Yo no me explicaba como había ocurrido el milagro. Parecía efectivo eso de prenderle cuatrocientas mil velas a San Cipriano.

Nos pagaban bastante menos que a los que trabajaban en la gran capital exactamente en el mismo puesto. Los gerentes siempre nos recordaban que "nosotros teníamos la playa". Parece ser que la playa la pagaba la empresa y nos la deducían del salario.

Entras al despacho. Ahí esta nuestro amigo manager. Te explica la historia: el proyecto Porsche es uno de los más punteros de la empresa (uno sospecha que es puntero a null).

¿Qué diferencia hay entre emigrar y ser desterrado? Ante los ojos de los demás, quizás ninguna. Los motivos del emigrante eran excusas para el desterrado.

—¿¡Amor...!? Su voz sonaba como un concierto de arpas celestiales. —¡Dime, preciosa! —dije. —Creo que se me ha adelantado el periodo. Ya la jodimos. Artillería, guarden las arpas, saquen los morteros, todos a sus trincheras. Pasamos de "plácido domingo" directamente a "DEFCON2". Nuestra relación se encuentra bajo amenaza nuclear. Mi simple y dicotómico cerebro de programador, cuyas variables podían encontrarse únicamente en los estados sí o no, se iba a enfrentar a un complejo sistema cuántico que soportaba los estados sí, no, no sé, tú no lo entiendes, te odio y no quiero verte más, o cualquier combinación de ellos. Además se aplicaba el principio de incertidumbre: el intento de medición influye en lo que se pretende medir. O sea, que como preguntes, peor.

Yo miraba al horizonte, preguntándome qué podía hacer yo. El horizonte me respondió, alto y claro: To be a rock, and not to roll... 

Lo dicho, ya seáis ingenieros, como mineros, le daría una oportunidad al libro, cuando tengáis una tarde tonta de no saber que leer y tal, al menos la risa está asegurada.